Mejoran la iluminación en el Parque El Moral, sobre la Cr. 9, entre Calles 153 y 155

La Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP) mejorará la iluminación en el parque El Moral con luminarias tipo LED de alta eficiencia en tres nuevos postes de 10 metros de altura. Foto: Albert Díaz.

Con el fin de mejorar la seguridad en el Parque El Moral, ubicado sobre la Carrera 9 entre calles 153 y 155, la Mesa Ambiental de la Quebrada El Cedro solicitó al Distrito estudiar la posibilidad de mejorar el alumbrado público en la zona, principalmente en el sendero peatonal, donde se han reportado sospechas de intento de atraco y brotes de microtráfico de estupefacientes.

La Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP), por medio de la Subdirección de Servicios Funerarios y Alumbrado Público, realizó una visita técnica en la que identificó deficiencias en la iluminación del lugar, por lo que mejorará el servicio con la instalación de tres nuevos postes de 10 metros de altura con luminarias tipo LED de alta eficiencia, que serán instalados por Codensa S.A ESP, según la programación de trabajos de expansión que se definió este mes de mayo del presente año.

La comunidad del sector agradece a la Alcaldía Mayor de Bogotá y a la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP) por atender este requerimiento.

Saneamiento ambiental del Canal El Cedro no se realizará en el 2020

El Canal (Quebrada) El Cedro, que baja por la Calle 153, recibe aguas servidas que deterioran el recurso y que ponen en riesgo la salud de los vecinos de la zona.

La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá indicó que la corrección de las conexiones erradas en el ‘cuerpo’ de agua que baja por la Avenida La Sirena se realizará hasta el 2021.

Magda Ivón Castaño Charry, Jefe de la División del Servicio de Alcantarillado Zona 1 de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, comentó que la Entidad por el momento tiene otras prioridades. Una de ellas es la contratación para la identificación, el diseño y la eliminación de las conexiones erradas de los Canales Molinos, Córdoba, Callejas y Contador, con lo cual se espera mitigar la contaminación del Humedal Córdoba.

De otra parte, la funcionaria agregó que la Dirección Red Troncal de la Empresa está adelantando el proceso licitatorio ICSM-0700-2018, cuyo objetivo es realizar la “Ingeniería de detalle para la renovación del sistema troncal de alcantarillado de la subcuenca Molinos”.

En otro frente, Castaño Charry reveló – además – que la Gerencia Zona 1 cuenta con el contrato de obra No. 1-01-31100-1443-2018, para la «Identificación y corrección de conexiones erradas del Humedal Juan Amarillo en el marco del Plan de Identificación de Conexiones Erradas (PICCE Zona 1 – Grupo 1), en atención a la Acción Popular número 479-01, para el saneamiento del Río Bogotá».

La Funcionaria concluyó que, una vez se efectúen los proyectos y obras anteriormente mencionadas, se espera que sea posible continuar con la ejecución del proyecto con código No. LS-4001-041, para la “Eliminación de conexiones erradas en la cuenca del Canal Cedro”, en el año 2021.

Problema ambiental de ‘vieja data’

Un punto crítico es la descarga de aguas negras que se evidencia desde la Carrera 9 hacia el occidente, sobre la Calle 153.

Ramón Chaparro, vecino y líder del sector, considera que el Acueducto tiene el deber de trabajar por la recuperación de esta microcuenca. “Esta no es una solicitud ciudadana es una obligación de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá cerrar las conexiones erradas que contaminan el agua del Canal El Cedro. Este problema lo tenemos hace varios años y no se le ve voluntad a las autoridades competentes”, expresó.

Malestar por la falta de señalización vial en la Calle 153

Desde el 2017, que fue rehabilitada, la Calle 153, entre la Carrera 7 y la Carrera 9, está sin la señalización correspondiente. Ni el el IDU ni la Secretaría Distrital de Movilidad le han respondido a la gente, que necesita la demarcación vial con carácter urgente. 

La comunidad está indignada porque desde el año 2017 el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) y la Secretaría Distrital de Movilidad (SDM) estarían eludiendo la responsabilidad de instalar los dispositivos de seguridad vial en la Avenida La Sirena, entre la Carrera 7 y la Carrera 9.

Movilidad dice que la señalización del primer tramo de la Calle 153 es competencia del IDU, en el marco del contrato IDU 1654 DE 2014, en el que se rehabilitó el tramo vial en referencia y no se ubicaron las señales de tránsito correspondientes debido a que el Contratista se quedó sin recursos.

Según el Código Nacional de Tránsito, en todo contrato de construcción, pavimentación o rehabilitación de una vía urbana o rural será obligatorio incluir la demarcación vial.

El IDU, por su parte, ha dicho que se está trabajando en un convenio con la SDM para la implementación de los dispositivos de tránsito para mejorar la seguridad vial en proyectos del Distrito Capital, entre ellos la Avenida La Sirena, entre la Carrera 7 y la Carrera 9.

Da la impresión de que la Subdirección de Señalización de la Secretaría de Movilidad desconoce este Convenio interinstitucional y sostiene que esa Dependencia ya evaluó y aprobó el diseño de señalización vial para la Calle 153, entre la Carrera 7 y la Carrera 9, el 29 enero de 2018, con el número de referencia: IDU 1654 DE 2014-01-2980.

Gerardo Sarmiento, vocero de la Veeduría Amigos de La Sirena, comenta que los mensajes de ambas entidades están generando confusión y que ya no saben a cuál de las dos creerle. “Siguen mamando gallo. Continúan ‘botándose la pelota’. Esperábamos que Movilidad hiciera referencia al Convenio interadministrativo del que nos han venido hablando últimamente desde el IDU, pero da la sensación de que la Secretaría Distrital de Movilidad desconoce el tema”.

El líder ciudadano hace un llamado a la Personería Distrital para que tome cartas en el asunto y no se dilate más esta situación que pone en riesgo la vida de los vecinos de los barrios Barrancas, Cedros Salazar y Cedro Golf, que transitan constantemente por esta vía.

Nuevas rutas del SITP en la Calle 153 siguen en el ‘limbo’

Los vecinos de la Avenida La Sirena han venido solicitando rutas del SITP que transporten pasajeros por la Calle 153, dese la Carrera 7 hasta la Autopista Norte y viceversa.

Los vecinos de los barrios Villas del Mediterráneo, Cedros Capri, Barracas y La Sonora llevan más de un año gestionando rutas del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) para movilizar pasajeros por la Avenida La Sirena, desde la Carrera 7 hasta la Autopista norte y viceversa.

La Empresa Transmilenio responde que una vez revisada la base de datos georreferenciada con la que cuenta la Entidad, identificaron que ya el SITP cuenta con rutas para el sector de la Calle 153 y menciona la C37, que viene de Mazurén, toma la 153 hasta la Av. 19, sube luego por la Calle 147 a salir a la Carrera 7 para luego ir a Villas de Granada, en Engativá.

La Empresa menciona también que ya se tiene habilitada la ruta E70, que viene de la Colina Campestre, sube por la Calle 153, toma la Av. 19, luego sube por la Calle 140 y posteriormente toma la Carrera 9 al sur, hasta Usme. Y agrega que la cobertura de estas rutas es de 500 metros a la redonda.

Lo que no parece tener claro la Institución es que estas rutas no atienden las necesidades de los vecinos de la Calle 153.

Bernardo Sánchez, residente del Conjunto Icatá Club Residencial y líder del sector, comenta que las rutas que menciona Transmilenio no responden a las necesidades de los barrios de la zona, donde entró en operación recientemente el segundo tramo de la Avenida La Sirena. En esta vía, recién ‘inaugurada’, no se cuenta con transporte público de calidad para atender la demanda en materia de movilidad. “Lo que se necesita es una ruta complementaria que baje por toda la Calle 153, desde la Carrera 7 hasta la Autopista Norte y viceversa, para facilitar los desplazamientos de los habitantes de los barrios La Liberia, Cedros Capri, Cedro Golf, La Sonora y Barrancas”, indicó.

Sánchez propone incluso mejorar el recorrido de la ruta 781 que viene por la Av. 19, sube por la Calle 151, se devuelve hasta la 146 y luego toma la Carrera 9 hacia el norte. “Esta alternativa se puede mejorar si en vez de subir por la 151 lo hace por la 153 y luego toma la Carrera 9 hacia el norte”, explicó.

Tener una vía recién hecha, pero sin servicio de transporte público no servirá de mucho para quienes han vivido casi 30 años ‘embotellados’ y sin alternativas en la movilidad. La pandemia y las medidas adoptadas por el Distrito incentivan el uso de la bicicleta, pero no siempre se podrá hacer uso de ella para llegar a nuestros destinos, por las condiciones climáticas, por la inseguridad o por la edad. Ojalá Transmilenio reconsidere su postura y atienda la solicitud de esta comunidad.

Le dan una nueva oportunidad a los bolardos de la calle 153

Los bolardos de la Calle 153 con Carrera 8A habrían sido vandalizados por inescrupulosos o desadaptados sin conciencia por el cuidado de los bienes públicos.

El deterioro de los bolardos de la carrera 8A con calle 153, ocasionado presuntamente por vandalismo e imprudencia por parte de algunos conductores, llamó la atención del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), que confirmó que serían priorizados para su reposición.

Meliza Marulanda, Directora Técnica de Construcciones, comentó que es posible llevar a cabo la priorización para ejecutar la reparación del bolardo en la Carrera 8A con Avenida Calle 153, una vez se tenga conocimiento del balance del contrato IDU 1639-2019, que tiene como objeto el mantenimiento, rehabilitación y reconstrucción de espacio público en Bogotá. Se espera que le den ‘luz verde’ a este arreglo la primera semana de mayo de 2020.

Gerardo Sarmiento, vocero de la Veeduría Amigos de La Sirena, manifiesta que está muy bien que el IDU tome cartas en el asunto y es un indicio que demuestra que la obra ya fue recibida por la Entidad. “Estos bolardos son derribados por algunas personas desadaptadas o inescrupulosas por lo que hacemos un llamado a la comunidad para que tome conciencia sobre el cuidado de los bienes públicos, ya que su deterioro implica costos que tenemos que asumir todos nosotros como contribuyentes”, indicó el Veedor ciudadano.