Con preocupación por la falta de poda y mantenimiento de los individuos arbóreos de la Calle 153 con Carrera 8A, junto al Conjunto Residencial Altos del Moral, se envió una solicitud al Distrito para que realice una poda de realce, debido a que el follaje de los árboles está casi en el suelo.
La respuesta que dio Promoambiental es que el Jardín Botánico José Celestino Mutis (JBB) es la Entidad que tiene la competencia de intervenir el arbolado que está sobre los andenes de la Avenida La Sirena.
Lo curioso es que hace más de un año (septiembre de 2020) fue el Operador de Aseo el que podó más de 400 árboles que están en el espacio público de la 153, entre la Carrera 9 y la Avenida 19.
Esta es una solicitud que se viene haciendo desde hace años por parte de la comunidad que considera que el paso por este tramo de La Sirena se ha vuelto peligroso por cuenta de las ramas de los árboles que quitan visibilidad al transeúnte.
Algo tan simple como podar un árbol en Bogotá puede tardar hasta dos años, según lo manifestó un funcionario del JBB, y el proceso se vuelve más engorroso si éste no está censado en el SIGAU (Sistema de Información para la Gestión del Arbolado Urbano) de Bogotá.
La poda además debe ser autorizada por la Secretaría Distrital de Ambiente, por solicitud de la UAESP (Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos). Toda una tramitología que hace inoperante un proceso que requiere periodicidad y premura toda vez que los árboles sin un mantenimiento adecuado hacen ver a la Ciudad descuidada e insegura.